viernes, 4 de noviembre de 2011

Primer avance del proceso de investigación



¿Cómo detectar y resolver las necesidades educativas especiales en el aula en la actualidad en México?



Necesidades educativas especiales en el aula en la actualidad en México


  Primero pondremos en claro el concepto de necesidades educativas especiales (NEE). Un alumno tiene necesidades educativas especiales cuando presenta dificultades mayores que el resto de sus compañeros para acceder a los aprendizajes que se determinan en el currículo que le corresponde por su edad y necesita, para compensar dichas dificultades, adaptaciones de acceso y/ o adaptaciones curriculares significativas en varias áreas de ese currículo.

El alumnado con necesidades educativas especiales es "aquel que requiera, por un periodo de su escolarización o a lo largo de toda ella, determinados apoyos y atenciones educativas específicas derivadas de discapacidad o trastornos graves de conducta".

Los casos de Altas Capacidades Intelectuales (Superdotado) también se consideran como personas con necesidades específicas de apoyo educativo, ya que en este caso, los contenidos curriculares suelen resultar fácil o incluso aburridos para este alumnado, que tiene mayor capacidad.

La denominación de necesidades educativas especiales referida a los alumnos con dificultades importantes en el aprendizaje intenta crear un enfoque en el que se acentúen las necesidades pedagógicas que estos presentan y los recursos que se han de proporcionar, en lugar de realizar categorías diagnósticas por el tipo de discapacidad que los afectan, si bien no se deben obviar los aspectos clínicos en la evaluación e intervención de estas necesidades. Las necesidades educativas especiales pueden ser temporales y permanentes y a su vez pueden ser debidas a causas: físicas, psíquicas, situaciones socio-familiar.

La educación pública para niños y jóvenes con discapacidad está en riesgo luego de que la Cámara de Diputados determinó un recorte de más de 78 millones de pesos al Programa de Fortalecimiento a la Educación Especial y de la Integración Educativa.

El recorte presupuestal podría generar, en el peor de los escenarios, reducir al mínimo la cobertura entre las personas que lo necesitan. Sin embargo, como efecto inmediato, se verá afectada la disposición de materiales utilizados en alumnos con discapacidad.

Los libros en braille; los audio cuentos para los alumnos con discapacidad visual; el diccionario en lengua de señas para alumnos con problemas auditivos y los materiales orientados a maestros y padres de familias de niños y niñas con discapacidad, serán las primeras víctimas del citado recorte.

La modificación al presupuesto también repercutirá en los recursos destinados a los más de 22 mil niños genio o sobresalientes que viven en México.

La Secretaría de Educación Pública (SEP) reconoció que 170 mil 550 niños y adolescentes con discapacidad en lo intelectual o motriz están en riesgo de dejar de ser atendidos en 2011, debido al recorte presupuestal de más de 28% al programa de integración educativa.

Ante este escenario, Mary Telma Guajardo Villarreal, diputada federal e integrante del grupo parlamentario del Partido de la Revolución Democrática (PRD), presentó una propuesta con punto de acuerdo en el que sostiene que estos 170 mil 550 niños y adolescentes deben ser atendidos por el Estado, puesto que “el artículo 41 de la Ley General de Educación establece la obligación de promover la integración de las niñas y niños con discapacidad a las aulas y escuelas generales”. La cobertura es para 32 entidades federativas del país.

La diputada propuso el pasado 12 de enero ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión un exhorto al secretario de Educación Pública, Alonso Lujambio, para que pidiera a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) una partida extraordinaria, con el fin de aumentar los recursos destinados al Programa de Fortalecimiento de la Educación Especial y de la Integración Educativa para que los niños con discapacidad y necesidades especiales (niños sobresalientes), desarrollen al máximo sus potencialidades y satisfagan sus necesidades básicas de aprendizaje, como base para su integración social.

“La educación especial no ha sido atendida como debería. El recurso ha sido insuficiente, y este recorte no ayudará a que se implementen las adecuaciones en los contenidos para que los niños con discapacidad y necesidades especiales en edad escolar alcancen los propósitos educativos y desarrollen todas sus potencialidades como seres humanos”, comenta la legisladora.

“Este recorte segregará a un número mayor de niños que requieren educación especial. Es decir: menos recursos y grandes retos. Esto no está bien, pues uno de los requerimientos sociales más importantes, planteado por las madres y los padres de familia y muchas organizaciones civiles, se refiere a la generación de más oportunidades educativas para niñas y niños con necesidades educativas especiales, particularmente para quienes tienen alguna discapacidad”, expresa Guajardo Villarreal, en entrevista con EL UNIVERSAL.

Las diferentes categorías de la educación especial aparecieron cuando ocurrieron los cambios en el campo de dificultades de aprendizaje. La evolución de la terminología llegó como su propia categoría por parte de las preocupaciones de los padres y los profesores quienes pensaban que los alumnos con dificultades de aprendizaje deben ser separados de los con necesidades educativas. Desde esta opinión, llegaron evaluaciones para detectar un trastorno y por eso la necesidad de tener escuelas separadas para los alumnos quienes no coinciden con el desarrollo normal en los tests. Además es una extensión del concepto de la educación especial que fue más conocido durante la primera mitad del siglo XX. Cuando la mitad del siglo llegó, el concepto de la educación especial movió afuera de los trastornos y tuvo más en cuenta las influencias sociales y culturales. Con estos cambios las necesidades educativas especiales lograron como su propia categoría de dificultades de aprendizaje y separó de la educación especial.1 También después de los años sesenta y setenta, Marchesi propuso diez factores que fueron determinantes por la termina <<necesidades educativas especiales>> a causa de los cambios que habían ocurrido. Algunos incluyen la concepción de los trastornos y los procesos del desarrollo, las experiencias con la integración y los movimientos por la igualdad. La evolución de la terminología puede ser caracterizada por las siguientes etapas: “el modelo clínico tradicional, el paradigma de la rehabilitación y, más recientemente, el paradigma de la autonomía personal…”2 En general hay una ampliación del concepto como algo más inclusivo de la diversidad y que continuamente está desarrollándose.

Brennan Wilfred, "El curriculum para niños con necesidades educativas especiales", Siglo XXI editores. 1988.

2 comentarios:

  1. compañero, es necesario el dar a conocer a la sociedad todas las alternativas, ya que muchas personas aun desconocen, como ayudar a estos alumnos, buen tema

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  2. muy buena información y tu referencias muy confiables. y ya te decidiste en que área te vas a enfocar ?

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